¡Falso! El cáncer de mama puede estar relacionado con los antecedentes familiares o con otras causas como la alimentación, ya que se desarrolla por el aumento del estrógeno, y el tejido graso segrega altas cantidades de esta hormona.

¡Falso! Aunque tengas antecedentes familiares, hay hábitos de vida que puedes adoptar y que reducen considerablemente tus probabilidades de desarrollarlo, como dormir más, comer bien, practicar ejercicio, mantener un peso saludable, evitar las bebidas alcohólicas y las terapias hormonales.

La mayoría de los bultos mamarios no son cancerosos, pero igual es necesario que ante la aparición de un bulto consultemos con urgencia al médico para descartar la posiblidad de cáncer.

Las biopsias son la única manera de saber con certeza si un bulto sospechoso en el seno es canceroso o benigno.

¡Falso! Otros síntomas pueden ser la irritación o formación de hoyuelos en la piel, el dolor o retracción de los pezones, la inflamación axilar, las secreciones inusuales del pezón, las zonas rojizas o durezas en la piel, o cambios en el tamaño, contorno, textura o temperatura del seno.

No hay pruebas concluyentes que demuestren que el uso de antitranspirantes, sostenes con aros, o los golpes y hematomas en la zona estén relacionados con la generación de tumores malignos.

No es cierto. Un estudio realizado en 2004 por el grupo Austrian Sentinel Node Biopsy Study Group, de Viena, en más de 2.500 pacientes con cáncer de mama, no halló ningún caso de diseminación de células tumorales luego de realizarles una biopsia.

Las tasas de cáncer de mama son bajas en las mujeres menores de 40 años. Los índices comienzan a aumentar después de los 40 años y son más altos en las mujeres mayores de 70 años.

Según la fundación Susan G. Komen, no existe evidencia científica que demuestre que los implantes mamarios salinos o de siliconas aumentan el riesgo de que una mujer desarrolle cáncer.

¡Falso! Un antecedente de cáncer de mama o de próstata en un pariente varón cercano (padre, hermano o tío) sí puede aumentar tu riesgo.

Verdadero. El diagnóstico en una etapa temprana y los tratamientos actuales permiten que muchas mujeres se curen y tengan pocas probabilidades de que el mismo recurra.

No necesariamente. La elección del tipo de cirugía depende de diversos factores. En aquellos casos en los que los dos tipos de cirugías son una opción, las mismas han demostrado eficacia similar.

No existe ningún estudio científico que demuestre que los remedios de hierbas, suplementos nutricionales, dietas especiales, tratamientos naturales o terapias alternativas ayuden a curar el cáncer de mama.